El 23 de diciembre se pone fin a la Saturnalia 2022, importante festividad de origen romano que se celebraba en honor a Saturno, día en cuyo templo, situado en el Foro de Roma, se realizaban ofrendas y diversos rituales. También se hacía un banquete público y el ambiente de fiesta, a modo de carnaval actual, permitía durante una semana cierta relajación en las normas sociales. Incluso el poeta Catulo llegó a llamar estas fiestas como «los mejores días».
La Saturnalia fue introducida a finales del siglo III a. C. con el objetivo de elevar la moral romana tras la derrota sufrida por el ejército itálico ante los cartagineses en el Lago Trasimeno (año 217 a.C.). Oficialmente se celebraba el día de la consagración del Templo de Saturno, concretamente el 17 de diciembre, al grito multitudinario de ¡Io, Saturnalia! Esta fiesta era muy apreciada por el pueblo, por lo que de forma no oficial se festejaba a lo largo de siete días, concretamente del 17 al 23 de diciembre.
En las fiestas Saturnales se decoraban las casas con plantas y se encendían velas para celebrar el nuevo régimen de luz invernal. Los romanos amigos y familiares se hacían regalos, al igual que hoy en Navidad; incluso los esclavos eran frecuentemente liberados de sus obligaciones y sus papeles, en algunos casos, cambiados con los de sus dueños.
En realidad, se celebraba un nuevo ciclo agrario, ya que suponía el fin de la reducción de los días solares y el inicio de una nueva etapa con el Solsticio de Invierno, cuando los días empiezan a alargarse. Es decir, eran unas fiestas relacionadas también con la finalización de los trabajos del campo, ya que se celebraba tras la conclusión de la siembra de invierno. No podía ser de otro modo, ya que Saturno era el dios del tiempo y el ciclo agrícola.
Lawrence Alma-Taderna, !Ave, Caesar! !Io, Saturnalia!, 1880. Museo de Arte de Akron (Ohio, EEUU)